Su mirada desinteresada que apenas se conectaba con la mía apartaba.
Mi mirada que bajaba como si en realidad no me importara.
Mi mirada que bajaba como si en realidad no me importara.
Callaba mi boca, y a mis ojos también. Ya no sabía más que hacer.
Él no me miró más y partió.
Y allá atrás olvidó mi corazón..